24 horas en Valencia

Ese es el tiempo que estuvimos en esa ciudad. Llegamos el domingo sobre las 12 del mediodía después de un breve viaje desde Calpe y salimos el lunes sobre las 12 del mediodía de la Pza del Ayuntamiento de Valencia, donde teníamos el coche aparcado.

Entre tanto nos dió tiempo a dar una pequeña vuelta por el centro histórico, visita al Oceanografic, visita al puerto, y el lunes por la mañana, después del desayuno, otro pequeño paseo por el centro histórico. Es una ciudad a la que debemos volver porque hay muchas cosas que no hemos podido visitar. Según la chica de información turística, sólo necesitas 5 días para ver todo más o menos bien.

Una de las cosas que pudimos medio ver es la parte del Valencia Street Circuit que pasa por la zona del puerto, y digo medio porque en medio del asfalto por donde corren los F1, hay aceras, farolas, maceteros con flores, etc. La otra parte del trazado está cerrada al tráfico. Nosotros vimos desde la zona de boxes hasta el puente que abre y cierra el puerto.

Y para que veáis lo que os digo, aquí van unas cuantas fotos de lo que vimos. Espero que os gusten:

Este es el edificio donde las escuderías de F1 montan los boxes.

Detalle de restos de goma en la zona de boxes.

Foto obligada, por supuesto, es la pole del circuito, desde aquí salió este año Vettel.

Curva 3 del circuito, la zona donde están los equipos que compitieron en la Copa América, al fondo está el edificio del BMW-Oracle.

Curva 9, la que da acceso al puente, en la foto se ve que el puente está abierto, a partir de esta curva hasta la última curva que da acceso a boxes el circuito está cerrado.

Y para terminar, una foto que me hizo mi mujer en la zona de prensa del circuito.

En algunas fotos se ven unos pelos, que son los de mi hijo, espero que entendáis por qué he tenido que recortar un poco las fotos.

Después de este paseo por el circuito nos pasamos por Casa Calabuig, pero lo hicimos sin bajarnos del coche. Teníamos la intención de cenar y este sitio era una opción como otra cualquiera. En ese momento no vimos pasar comida y no vimos ningún cartel de raciones, tapas, etc. con lo que dedujimos, mal por supuesto, que no tenían de comer. Después nos enteramos de la realidad. Bueno para otra visita.