El Circuito Guilles Villeneuve está localizado en la Ile Notre-Dame, una isla artificial situada en el rió San lorenzo y que es parte del Parque Jean Drapeau de la ciudad de Montreal, provincia de Quebec, Canadá.
Este es un circuito callejero que debe su nombre al piloto canadiense Guilles Villeneuve. El circuito ha sido utilizado para el Gran Premio de Fórmula 1 de Canadá desde 1978, con dos ausencias en 1987 y 2009.
El circuito Gilles Villenueve es todo velocidad punta.
La longitud del trazado del circuito de Montreal es de 4.361 metros al que se le tendrá que dar 70 vueltas para recorrer una distancia total de 305,270 km.
Montreal es propicio para ofrecer carreras excitantes y es, definitivamente, uno de los trazados donde adelantar es más fácil. Es una pista donde se puede correr con menos carga aerodinámica comparada con las carreras anteriores y también es un trazado con personalidad propia. Es uno de lo GP más duro para los frenos y también para los motores. Físicamente para los pilotos, es uno de los circuitos menos exigente, pero no tolera el más mínimo error, debido a la proximidad de los muros de hormigón. Es un circuito rápido, exigente y que no perdona.
La poca carga aerodinámica unida a la poca adherencia del asfalto, hacen difícil encontrar los reglajes óptimos para el coche.
La salida de esta carrera se hace desde una recta de alta velocidad en la que se van subiendo velocidades y se alcanza 300 km/h. Le sigue una frenada previa a la primera curva que es a izquierdas y se toma en segunda velocidad a 115 km/h., dando ligeros toques de freno y bajando a primera velocidad porque enseguida nos encontramos con la segunda curva, esta a derechas, y que se toma a 65 km/h. Le sigue una pequeña recta en la que se sube hasta cuarta velocidad y se alcanza 245 km/h y termina en una fuerte frenada reduciendo a segunda velocidad para tomar la próxima chicane derecha-izquierda a 115 km/h. la salida se negocia por la parte izquierda acelerando a 130 km/h y se sigue subiendo marchas para frenar de nuevo y reducir a segunda para negociar un ángulo rápido acelerando a fondo hasta alcanzar los 240 km/h. Aunque se trace a fondo no es fácil porque la fuerza centrífuga saca al coche hacia fuera. Hay que frenar enseguida y bajar a segunda para afrontar la siguiente chicane que es izquierda-derecha y que se toma a 90 km/h en la entrada para salir a 130 km/h.
En la siguiente recta se sube hasta 300 km/h, en quinta velocidad, para frenar de nuevo, bajando a tercera y no saliéndose de la trazada porque, en esta parte, el circuito está muy bacheado y se tiene que acometer una curva a la derecha, volviendo a reducir a segunda y bajando a 105 km/h en la siguiente curva a izquierda. La salida de hace por la parte izquierda y se acelera para salir a 145 km/h y acometer la siguiente recta acelerando y subiendo velocidades hasta sexta a 290 km/h. Al final de esta recta está el punto más claro de adelantamiento, puesto que se realiza una brutal frenada, reduciendo a primera para acometer la horquilla a 60 km/h. A la salida de la horquilla se acomete la recta más larga del trazado, se acelera a fondo durante 15 segundos y se suben velocidades hasta el desarrollo más alto y alcanzando 318 km/h. El final de esta recta termina en la última chicane del trazado, esta es a derecha-izquierda, con otra brutal frenada para entrar en segunda a 120 km/h y se sale a 130 km/h aprovechando todo el ancho de la pista para alcanzar la línea de meta con buena velocidad.
6 comentarios:
Como ya va siendo tan habitual que corre el riesgo de convertirse en costumbre, el amigo Dauro nos vuelve a regalar con su "Introducción al GP de turno", lo que es digno de agradecimiento, porque, aparte de hacernos salir de la aparente inopia deportivo-motora en que estamos inmersos desde los últimos comentarios a la anterior prueba, nos hace conocer con detalle el trazado que será escenario de la próxima y con ello empezamos a elucubrar sobre las posibilidades de éxito de unos y otros, tanto en lo subjetivo (escuderías, pilotos, apostantes), como en lo objetivo (ésta o aquella estrategia, tal o cual juego de neumáticos, apuesta arriesgada o no tanto para la porra), como, sobre todo, nos concita a que vayamos interviniendo y a que salgamos así del letargo automovilístico en que nos sume la falta de actividad, a pesar de los periodistas, de la FIA y de los cerebros pensantes que últimamente no consiguen provocarnos -como sí otras veces- lo suficiente como para darle al teclado hasta a deshoras. Gracias, Dauro y a seguir así.
Red Bull le renueva el contrato a Webber para que el 2011 siga corriendo de azul.
Inteligente maniobra. De esta manera el equipo Red Bull no corre el riesgo de que el posible campeón del Mundial 2010 se lleve el número 1 a otro equipo. O puede que la firma de este contrato lleve el condicionante de que sea Webber el que asuma su condición de segundo y se emplee para que sea su compañero, Vettel, el campeón que todos quieren.
Hola!
Muchas gracias Dauro por la fantástica explicación del circuito. Según lo leo me lo voy imaginando subido en el monoplaza... jejeje
Saludos a tod@s!
Hola a tod@s:
Dauro, gran currada de como es el circuito. Nos estás acostumbrando muy mal.....
Muchas gracias
AAAAAAAAdios
Chicos, dejaros de agradecimientos, que estamos aquí de forma totalmente voluntaria y para compartir nuestra pasión los unos con los otros.
Edu, currada la que tu te metes con la porra.
Gracias por La entrada Dauro. Gran trabajo!
Respecto a la renovación de Webber, apuesto por la opción de retener el número 1 en la escudería gane quien gane. No veo a Webber en una posición tan debil como para aceptar ser el nuevo Barrichello de la F1. Ahora, le han puesto el listón muy muy alto en Red Bull, por que ahora va primero y sólo le renuevan un añito....
Saludos cordiales!
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