Buceando desde Bahréin

Contamos, desde el preámbulo más inmediato de la temporada 2010, con una prueba evidente de un trato de favor tolerado por la FIA. Parece ser que la Fédération se empeña en dejar un nuevo testimonio de las prácticas más recientes propias de república bananera. Volvemos a las andadas.

Se trata, como ya es público, del equipo McLaren. El ente regulador ha olvidado totalmente el engaño que la escudería de Woking les dedicó hace un año. Whiting, sin duda aleccionado por una de las hipóstasis del caballero blanco, se ha adelantado a impedir que tengan que abrir la boca para hacerlo. La prebenda de la ventaja en la primera parte del campeonato ya les ha sido concedida. Brawn ya no está, se ha ido con los alemanes y el equipo inglés que queda, el mejor situado y más inglés que nunca, es a quien reservan los laureles. Hay también una venganza doble de por medio. El comisario jefe, tras la marcha de Moxley, es ahora el bastión del caballero blanco. La FIA comienza a ser más Fédération; Britain se convierte en Bretagne por momentos; Prost ingresa como commissaire. Es difícil que la hipóstasis encuentre un confidente y socio de sus anhelos. Todt no está receptivo. No hay más remedio que acudir a la vieja guardia que sirve al nuevo emperador y recordarle quién le ascendió como legado de los pretorianos.

La vendetta ha de proseguir, contrariando al equipo más influyente, el mayor responsable de la caída del antiguo régimen. Hay que procurar ir minando su leyenda, acostumbrándole a ceder el trono a equipos que comienzan a forjar la suya. El golpe de Estado con los nuevos equipos no se impuso, pero, quizás, no esté todo perdido para la revolución de los nuevos campeones.

Durante los últimos tests oficiales, observamos una pequeña "chimenea" curva (snorkel), con la consiguiente abertura, en el extremo delantero del monocasco en la parte superior izquierda. En distintos foros, comenzó la perplejidad y la especulación sobre su función. Algunos,entre quienes me incluyo, confiando --con ingenuidad, no hay duda-- en que la FIA, tras la experiencia reciente, se habría de mostrar taxativa en erradicar las "irregularidades" de los equipos en pos de un campeonato libre de sospecha, para no aventar el rescoldo, quisimos ver en esa abertura una finalidad "inofensiva". En la misma medida en que el snorkel resultaba burdo, ostensible y con apariencia de ilegalidad (máxime cuando se ha incidido reglamentariamente en la homologación de los componentes del monoplaza), de igual modo, sospechábamos que no había doblez en ello y pensábamos en la refrigeración extra del habitáculo de la estructura de seguridad. Por consiguiente, no queríamos contemplar una canalización interna con aberturas, aparte de la propia de admisión del snorkel, taponables mediante las articulaciones de las extremidades de los pilotos. Un agujero que se tapona no sería una manija que se manipula, salvando así la prohibición expresa de partes móviles en el monoplaza para regular sobre la marcha la aerodinámica, aparte de las contempladas en los alerones delanteros. Ese flujo de aire admisible y regulable, aunque no manipulable --¡menuda justificación!-- incidiría en quitar drag al alerón trasero o en incrementar la eficiencia del difusor, aún no está claro.

Hemos visto a Whitmarsh, a su llegada a Bahréin, pavonearse, sin poder evitar declarar con cada gesto de su cuerpo "¡qué listos que somos!: todo el mundo va a querer copiarnos". Daba a entender que, por la misma homologación del chasis no lo iban a tener fácil, confesando de manera insensata --él mismo, además, ha insistido en declarar en el mismo Bahréin la ilegalidad de los dobles difusores del pasado año-- una situación similar, susceptible de generar la misma polémica. Y es que, por momentos, se transfiguraba en Ross Brawn cuando decía que los equipos no serían capaces de comprender el funcionamiento del sistema cuya parte visible era el snorkel. En fin, de momento, tienen el plácet de Whiting, sospechamos que no tanto el de Todt. Horner ya ha protestado de manera diplomática --en este caso y en este momento equivale a hacerlo enérgicamente. Ferrari, de momento calla, a pesar de que el patrón de Red Bull pretenda implicarlos ya mismo en la protesta. Veremos qué ocurre si, realmente, se demuestra que los MP4-25 son hasta 10 kms/h más rápidos que los F10.